FISC lanza una campaña para mantener abierto el Dispensario de Salud en el barrio Nueva Vida, Ciudad Sandino
La crisis del coronavirus se ha unido a la gravísima situación que ya sufría Nicaragua. Desde el principio de la pandemia, en el país, se ha negado la situación. A pesar de las recomendaciones de los organismos internacionales de salud y las propias asociaciones médicas y científicas de Nicaragua, no se han tomado medidas hasta el momento. Al principio de la pandemia incluso se reprimía el uso de mascarillas. Algunos ciudadanos que las usaban por la calle eran atacados; el personal sanitario recibió orden de no usarlas en los hospitales porque “alarmaban a la población”.
La pandemia de la COVID19 ha hecho colapsar el débil el sistema de salud público y privado de Nicaragua. Ante esa realidad, las asociaciones médicas nicaragüenses emitieron el 1 de junio un llamado urgente: han convocado una cuarentena nacional para contener la “fase de expansión acelerada y transmisión comunitaria” del coronavirus. Sin embargo, no ha habido respuesta. Tampoco hay información de los test realizados. La OPS (Organización Panamericana de la Salud), que capacitó al personal de Nicaragua, ha exigido información, sin respuesta.
Según el Observatorio Ciudadano COVID19, 72 trabajadores de la salud han muerto y 614 se han contagiado por COVID19. La Organización Panamericana de la Salud (OPS) estima que el número de muertos en Nicaragua es 21 veces mayor del que aseguran las cifras oficiales.
En medio de toda esta situación, FISC no ha dejado de dar respuesta a las necesidades más básicas de la población del barrio Nueva Vida, sin dejar a nadie atrás. Continúan manteniendo la atención sanitaria a esta población. En el dispensario se mantiene la atención médica general, el laboratorio de análisis clínico, la enfermería y curas y la venta social de medicamentos.
Sin embargo el apoyo es necesario para seguir afrontando esta situación y mantener los servicios médicos abiertos.
Por ello, difundimos esta campaña para:
Según el Observatorio Ciudadano COVID19, 72 trabajadores de la salud han muerto y 614 se han contagiado por COVID19. La Organización Panamericana de la Salud (OPS) estima que el número de muertos en Nicaragua es 21 veces mayor del que aseguran las cifras oficiales.
En medio de toda esta situación, FISC no ha dejado de dar respuesta a las necesidades más básicas de la población del barrio Nueva Vida, sin dejar a nadie atrás. Continúan manteniendo la atención sanitaria a esta población. En el dispensario se mantiene la atención médica general, el laboratorio de análisis clínico, la enfermería y curas y la venta social de medicamentos.
Sin embargo el apoyo es necesario para seguir afrontando esta situación y mantener los servicios médicos abiertos.
Por ello, difundimos esta campaña para:
- Garantizar una consulta médica general: 2 euros
- Realizar un Biometría Hemática Completa (BHC) en el laboratorio: 3,2 euros
- Realizar un Examen General de Heces (EGH) en el laboratorio: 2,8 euros
- Facilitar un tratamiento completo de antibióticos (ceftriaxona): 3 euros
- Tratamiento completo desparasitante (albendazol): 3,3 euros
- Realizar un chequeo médico infantil para todos los niños/as de un aula (35 niñas y niños): 75 euros
- Posibilitar el funcionamiento de toda el área de Salud (doctora, enfermera, laboratorista y responsable de Venta de Medicamentos) durante 1 mes: 5.466 euros
El compromiso con los colectivos más vulnerables es la razón de ser de nuestra ONGD FISC, y en estos Nicaragua necesita este apoyo más que nunca.
¡Colabora a mantener abierto el Dispensario de salud! #RecuperemosLaSolidaridad #Nicaragua