
A lo largo de una campaña de pruebas de nueve días, una pareja de robots exploradores de la ESA recorrieron de día y de noche un área de apariencia lunar de Tenerife, recopilando terabytes de datos para su posterior análisis.
A lo largo de una campaña de pruebas de nueve días, una pareja de robots exploradores de la ESA recorrieron de día y de noche un área de apariencia lunar de Tenerife, recopilando terabytes de datos para su posterior análisis.