Alguna vez habéis visto una imagen, normalmente publicitaria, que mostraba una ropa hecha de plástico reciclado. Normalmente nos dicen: “hemos utilizado X botellas de plástico para confeccionar la prenda”. Cuando la vi, el texto que explicaba cómo la prenda de vestir nos salvaría de ahogarnos en un mar de plástico hizo que se me pusieran los ojos en blanco y miré en los comentarios con la esperanza de encontrar a alguien más que estuviera preocupado con la propuesta, pero no pude encontrar sino alabanzas.
La ropa hecha de plásticos reciclados es un mercado en crecimiento y se nos venden todo tipo de pantalones, zapatos, bolsos, ropa deportiva, accesorios y mucho más como la solución para mantener los plásticos fuera de nuestros océanos. Estos artículos están hechos de botellas y redes de pesca de plástico desechados en el océano. Bueno, así es como se nos dicen que hacen. Preguntando a las compañías que venden ropa reciclada de dónde se recolectaron estas botellas la respuesta fue un tanto ambigua: India, China y el sudeste asiático y no se nos ofreció ninguna otra información.
Cuando empezamos a conocer la situación sobre los plásticos que plagan nuestros océanos, la idea parece muy atractiva y se puede pensar que podría ser parte de una solución; sin embargo, no se debe al plástico el impacto que tiene el plástico en el medio ambiente. Bueno, esto es parte de esto, pero no es la única razón de ello también están las microfibras. Las botellas de plástico y las redes de pesca desechadas convertidas en ropa, zapatos y accesorios no salvarán los océanos. Esto es simplemente una estrategia de marketing, solo detener la producción de plástico es la solución definitiva.
Dado que no tenemos acceso al interruptor de la fabricación de plástico, uno de los mejores pasos para sustituirlo es brindar asistencia financiera a las organizaciones que se centran en la educación y la creación de nuevas formas de fabricación de productos sin el uso del plástico.
Imagine lo que puede hacer con el precio de la nueva mochila Re-Nylon de Prada para conseguir que una ONG o un grupo organizado presione al gobierno para establecer una legislación que reduzca el uso de plástico en un país con una recolección de residuos inadecuada.
No estamos en contra del reciclaje del plástico, pero ¿no sería más inteligente y amable elegir una prenda de segunda mano o incluso ir sin ella, y pasar ese dinero para ayudar a solucionar los problemas reales presionando para evitar la creación de más plásticos?
Seguro que tienes opiniones sobre el tema. No te cortes.