Los recortes presupuestarios en sanidad amenazan el futuro del servicio que Pallapupas ofrece desde hace 11 años en los hospitales catalanes. Los centros socio sanitarios han tenido que reducir su presupuesto, del que procede buena parte de la financiación de los Programas de Payasos de Hospital y Teatro Social de la ONG catalana. El servicio de Pallapupas en los hospitales beneficia cada año a 50.000 personas en Catalunya, en su mayoría niños, pero también personas mayores y otros colectivos, como usuarios de salud mental y sus familiares.
La reducción del presupuesto que los hospitales destinan a Pallapupas afectan especialmente a cuatro de los 16 centros socio sanitarios donde trabaja la ONG. Por ello, desde Pallapupas se está luchando más que nunca para conseguir financiación privada y mantener el servicio de sus payasos de hospital. El objetivo es evitar que 10.000 niños y niñas se queden sin la visita de los pallapupas, y sin los beneficios de la medicina de la risa.
Pallapupas centra sus esfuerzos en estos momentos en salvar el servicio de Pallapupas en el hospital Parc Taulí de Sabadell, garantizado sólo hasta finales de este mes junio. La ONG busca la implicación de ciudadanos y empresas para aumentar las donaciones y el número de socios, y lograr así la financiación necesaria para que los pallapupas sigan visitando a los niños ingresados en el Hospital de Sabadell. Las familias y los trabajadores del centro sanitario han sido los primeros en movilizarse para mantener la presencia de Pallapupas.
El Parc Taulí es el segundo hospital que incorporó el servicio de Pallapupas, en el año 2004, y es uno de los referentes de la humanización de la salud que impulsa la ONG. Cerca de 6.000 niños reciben anualmente la visita de los pallapupas en el hospital de Sabadell, tanto en planta, como en hospital de día, consultas externas, UCI pedriátrica y neonatos.
Pallapupas ha iniciado un acción viral para que los pallapupas puedan seguir visitando a los niños y niñas del hospital de Sabadell a partir de julio. El objetivo es conseguir la implicación de personas, empresas y otros colectivos sociales, “porque la defensa de la salud de los más pequeños es cosa de todos”.
