totop

3interCat

Red iWith.org









INFÓRMATE :

iwith.org





Únete al equipo de iWith

Titular noticias

Federación Nacional ALCER

El rechazo a un órgano podría deberse a la activación inmunitaria contra un componente celular del propio receptor, presente incluso antes del trasplante.

Una nueva estructura celular descubierta por un equipo canadiense aporta más explicaciones a las causas del rechazo en el trasplante. Este hallazgo, que se publica en Science Translational Medicine, podría modificar el riesgo de rechazo en los receptores de órganos sólidos.

“Hemos encontrado un mecanismo que hace a los pacientes reaccionar contra los componentes de sus propios vasos sanguíneos, incluso antes de recibir un trasplante de órgano, e identificamos un fármaco que podría evitar este tipo de rechazo”, afirma la coautora Marie-Josée Hébert, especialista en trasplantes y profesora en el Centro de Investigación del Hospital de Montreal.

En el trasplante de órganos el rechazo aparece cuando el sistema inmunitario del receptor reacciona y considera al injerto un ente extraño; para evitarlo, donante y receptor deben ser compatibles en el tipo de sangre y de los antígenos leucocitarios humanos (HLA). Pese a que todo ello se tiene en cuenta y al avance en los tratamientos inmunosupresores, uno de cada diez trasplantes acaba en rechazo.

Las misteriosas causas que están detrás de esos fracasos parecen encontrarse en los vasos sanguíneos. Cuando los vasos se dañan, el rechazo resulta más difícil de tratar: “Hemos descubierto que los vasos dañados liberan pequeños fragmentos celulares: unas vesículas de la membrana de la célula que alertan al sistema inmunitario. Al realizar el trasplante, el sistema inmune reacciona atacando al órgano”, explica Melanie Dieudé, primera autora del trabajo.

Esas vesículas membranosas proceden de células moribundas, en la fase final de la apoptosis y generan autoanticuerpos. “Además de la reacción del sistema inmune a los HLA, se produce una sorprendente reacción a los componentes de nuestras propias células. La reacción no es sólo contra los elementos de otra persona, sino contra los propios elementos“, aclara Hébert.

Precisamente, los pacientes en espera de un trasplante a menudo presentan órganos disfuncionales, cuyas células empiezan a agonizar, al entrar en la fase apoptósica.

El equipo de Dieudé no sólo ha identificado a estas vesículas como causa del rechazo, sino que también ha determinado una forma para neutralizarlas. En concreto, ha recurrido a un fármaco, el inhibidor de proteosoma bortezomib, ya aprobado para tratar el mieloma múltiple, que bloquea la actividad de una enzima de las vesículas, impidiendo así que se active el sistema inmunitario. Los resultados obtenidos con este fármaco en animales y en cultivos celulares son muy prometedores, por lo que es posible que se continúen pronto en ensayos clínicos.

Si un potencial receptor ya ha reaccionado a esas pequeñas vesículas y entonces recibe el órgano que también se encuentra en proceso de liberar las vesículas, estamos probablemente ante una situación peligrosa. Es lo que estamos estudiando”, dice Hébert.

Fuente: Diario Médico


Mas sobre el tema: Noticias
15/02/2016
Fundación Alcer
Último en Novedades


iWith.org Improving the World using Information Technology to Help Organizations
Google + Facebook Twitter Youtube Rss