
Durante los seis meses que Thomas Pesquet pasó en la Estación Espacial Internacional llevando a cabo la misión Proxima, la ESA vigiló cuidadosamente su salud, como hace con todos sus astronautas.
Con pruebas que abarcan desde la forma física hasta el análisis de su sangre, los especialistas de la ESA protegen y promueven la salud de los astronautas antes, durante y después de que viajen al espacio.