
Las incubadoras estelares son lugares nubosos y polvorientos, muy brillantes al infrarrojo, y el complejo G305 no es una excepción. Presenta una serie de intrincadas y brillantes nubes de gas, calentadas por las estrellas que se gestan en su interior. En esta espectacular imagen del observatorio espacial Herschel de la ESA, estos puntos calientes de formación estelar destacan en una tonalidad azul que contrasta con el rojizo de las regiones más frías.