
La imagen de hoy nos muestra una peculiar formación de gas y polvo en el centro de la Vía Láctea, capturada por las cámaras del infrarrojo lejano a bordo del observatorio espacial Herschel de la ESA. La línea casi continua de cúmulos densos y fríos de material forma un símbolo de infinito, u ocho inclinado, de varios cientos de años luz de longitud. En la imagen, la línea da la vuelta sobre su propio eje en un movimiento que va aproximadamente de arriba a la izquierda hacia abajo a la derecha.