La revista El Siglo em publica en el seu número d’aquesta setmana l’article que trobareu transcrit a continuació.
LAS DESIGUALDADES SE DISPARAN
El pasado 6 de febrero, la Fundación Rafael Campalans hizo público, después de meses de trabajo, el Informe Social 2013. Paro, pobreza y desigualdades en Cataluña, un estudio destinado a reflejar la realidad social y el aumento de las desigualdades en los últimos años en Cataluña, coincidiendo con los momentos más álgidos de la crisis y la aplicación simultánea por los gobiernos español y catalán de políticas de austeridad y recortes sociales.
La tesis fundamental de este estudio, apoyada por numerosos análisis y datos, es que la crisis está afectando principalmente a los sectores con menos capacidad económica, los mecanismos de protección social son insuficientes con respecto a los sectores con ingresos más bajos, se generan brechas sociales, aumenta la desigualdad y hay riesgo de quiebra de la cohesión social.
Es un panorama ciertamente preocupante. Y que invita, más que a la reflexión, a actuar con urgencia con medidas económicas y sociales para poner remedio a la situación actual.
El informe, elaborado entre la Fundación Campalans y el Área de Cohesión Social del PSC, refleja el constante distanciamiento entre capas sociales, con indicadores contrastados, como el Índice de Gini, que mide hasta qué punto la distribución de los ingresos en una sociedad es equitativa o no. Como se dice en el estudio, por ejemplo, en el caso de Catalunya, “cada año que pasa está más lejos de Europa: si hasta 2009 nuestros niveles de desigualdad eran inferiores a los del resto de España y a los del conjunto de Europa, a partir del 2010 el Índice de Gini aumenta y en 2011 observamos un crecimiento de la desigualdad en la distribución de la renta a un ritmo más acelerado en Cataluña que en el resto de España y en el conjunto de Europa”.
El informe, dividido en tres ámbitos de estudio, aborda las consecuencias de la crisis, las políticas públicas en tiempos de crisis y el caso de determinados colectivos, como los jóvenes y mujeres, que sufren por partida doble los efectos de la crisis.
Una crisis que, con la aplicación conjunta de políticas públicas restrictivas, de austeridad y recortes sociales, ha agravado su impacto sobre la ciudadanía, especialmente en las personas con ingresos inferiores, a los que somete a una mayor indefensión.
Tal y como apunta Eva Granados en las conclusiones del informe, “cuando las desigualdades se convierten en pobreza y exclusión en el marco de un nuevo conflicto fratricida entre las clases sociales de siempre, se agrava la situación socioeconómica, el paro es insoportable y crecen las desigualdades. Y estas desigualdades tienen una cara oscura que se llama pobreza. Desde una situación de paro de larga duración se puede evolucionar hacia la pobreza severa y la exclusión, éstas son consecuencias dramáticas cada vez más frecuentes en nuestro país, un riesgo que ahora ya afecta a un 29% de la población catalana”.
Es imprescindible una acción política concertada que afronte de cara los problemas reales que vemos contrastados cada día. Es por ello, que el Grupo Socialista en el Parlament de Catalunya ha solicitado la celebración de un Pleno monográfico sobre pobreza y desigualdad, que tendrá lugar en el mes de marzo. Se trata de una oportunidad para abordar el problema más grave y urgente que tiene Catalunya, y también España, en estos momentos. La exigencia de este Pleno monográfico, que sigue la estela del que ya solicitamos y celebramos sobre la situación de la juventud, es una de nuestras obligaciones en tanto que partido político de izquierdas, especialmente preocupado por la situación económica y social de nuestros conciudadanos.
Esperemos que sirva para que el Govern de Catalunya responda al clamor de las entidades sociales que se dedican a esta labor, como Cruz Roja, que acaba de hacer público un informe donde denuncia que el 84% de las personas atendidas mayores de 45 años está en paro. Un paro que en esas edades puede ser una condena sin remisión, dadas las dificultades que el sistema de ocupación ofrece actualmente para la reinserción laboral de las personas en esta franja de edad.
Son tantos los datos que su sola enumeración abruma a cualquiera con un poco de sensibilidad. Para cualquiera que no se crea que la crisis ha sido ya vencida sólo porque la prima de riesgo haya aliviado su presión sobre nuestras finanzas. Nuestra obligación es renunciar a todo triunfalismo, analizar a fondo la dura realidad y seguir actuando para aliviar el drama diario de millones de personas.
El Informe Social de la Fundación Campalans, que puede consultarse aquí:http://fcampalans.cat/publicacions_detall.php?id=8&idpubli=293, debe estimularnos a todos, y en especial a la izquierda, para reivindicar la vigencia y la necesidad de mejora del Estado del Bienestar, garantizar una más equitativa distribución de los ingresos y empeñarnos a fondo en acabar con los orígenes de las desigualdades en nuestro país.
