Con ojos abiertos y curiosidad cautelosa, Aco está dando sus primeros pasos hacia un futuro mejor. Este joven chimpancé tenía unos cuatro meses de edad cuando lo rescatamos en julio de la jaula en la que vivía en Guinea Ecuatorial y lo trasladamos a Tchimpounga, el Centro de Rehabilitación del Instituto Jane Goodall en Congo. Aunque conseguirlo no fue fácil.
A principios de año, dos jóvenes españolas residentes en Guinea Ecuatorial nos alertaron sobre una cría de chimpancé en la ciudad de Bata, al oeste del país. La mujer local que lo estaba cuidando había pedido ayuda. Supuestamente, su jefe lo había rescatado, aunque las circunstancias exactas de su origen siguen siendo una incógnita.
Al no existir un santuario en el país, era fundamental encontrar un lugar seguro y acreditado donde el pequeño recibiera la atención especializada que necesitaba. La mejor opción era Tchimpounga, pero coordinar el traslado internacional entre ambos países resultaba complejo.

Primero, la Dra. Rebeca Atencia, directora del IJG Congo y de Tchimpounga, se desplazó hasta Guinea Ecuatorial para conocer al pequeño Aco y asegurar su traslado al Centro. Tras varias conversaciones con los gobiernos y con la estrecha colaboración de PASA, se organizó finalmente su viaje.
Acompañado por la Dra. Rebeca, Aco llegó a su nuevo hogar en Tchimpounga, donde el equipo veterinario estaba esperándole para atenderle. Allí constataron que estaba relativamente en buen estado, y solo mostraba síntomas respiratorios leves y dolor en un brazo.
Durante su período de cuarentena y adaptación a su nuevo hogar, la cuidadora Christelle del IJG ha ejercido de madre adoptiva, algo esencial para su desarrollo, ya que los bebés chimpancés dependen completamente de sus madres durante los primeros años de vida.
Desde el principio, Aco se ha mostrado cauteloso, aunque curioso, explorando con atención su nuevo entorno y ganando confianza. Poco a poco, ha sido presentado a otros jóvenes huérfanos también rescatados en Tchimpounga, con quienes está aprendiendo todo lo que necesita saber para prosperar como un chimpancé salvaje, desde trepar y buscar alimento hasta establecer relaciones sociales duraderas.

En Tchimpounga, Aco está recuperando la oportunidad de vivir la vida que siempre debió tener. Su rescate no solo ha salvado su vida, sino que también ha marcado un precedente en la protección de los primates, al tratarse de uno de los primeros rescates de chimpancés registrados en Guinea Ecuatorial y el primer traslado exitoso de un chimpancé entre Guinea y el Congo.
La historia de Aco no habría sido posible sin la coordinación entre el IJG España, el IJG Congo, el apoyo de los gobiernos de ambos países y el respaldo de PASA. Pero tampoco sin el apoyo de nuestr@s comprometid@s soci@s y donantes para hacer frente a los gastos derivados del rescate.
Tú también puedes formar parte de este éxito y ayudar a que más chimpancés, como Aco, tengan la segunda oportunidad que merecen. Realiza una donación, hazte Soci@ Chimpamig@ o apóyanos con 1€ al mes como teamer. Cada aporte nos permite salvar vidas y mantener vivo el legado de la Dra. Jane Goodall.
NOTA: El IJG no aprueba el mascotismo de primates ni el contacto o la interferencia con chimpancés salvajes. Los chimpancés que interactúan con cuidadores en estas imágenes son huérfanos rescatados y viven en el Centro de Rehabilitación de Tchimpounga.
Foto de portada: IJG / Fernando Turmo













