
El estrés oxidativo, resultado de una excesiva producción de especies reactivas del oxígeno o una reducción de las defensas antioxidantes, está en estrecha relación con el desarrollo de las complicaciones vasculares de la diabetes, incluidas la nefropatía y la arterioresclerosis.
Investigadores del Centro de Investigación Biomédica en Red de Diabetes y Enfermedades Metabólicas Asociadas (CIBERDEM), en el Instituto de Investigación Sanitaria de la Fundación Jiménez Díaz (IIS-FJD) y la Universidad Autónoma de Madrid (UAM), han descrito un nuevo abordaje terapéutico para combatir la inflamación y el estrés oxidativo en los tejidos dañados por la diabetes y así frenar la progresión de las complicaciones crónicas asociadas a esta enfermedad, concretamente en las arterias y el riñón.
El equipo investigador, liderado por Jesús Egido y Carmen Gómez Guerrero, ha demostrado de forma experimental que la terapia basada en la familia de proteínas SOCS reduce de forma efectiva la presencia de radicales libres en las arterias y el riñón, dos territorios muy susceptibles de sufrir daño por los niveles altos de glucosa y donde en mayor proporción se presentan las complicaciones de la diabetes.
El estudio, que ha sido publicado Laboratory Investigation, se realizó en ratones con diabetes, en los que se ensayaron dos abordajes experimentales: la terapia génica con un vector viral para expresar la molécula SOCS1 completa y el empleo de un péptido sintético que imita la funcionalidad de esta proteína.
Los dos abordajes experimentales planteados fueron beneficiosos en los ratones diabéticos, aunque el péptido derivado de SOCS1 mostró tener una mayor reducción del estrés oxidativo tanto in vitro como in vivo y un superior efecto protector frente a la diabetes.
Este tratamiento fue capaz de reducir los niveles de marcadores de oxidación en el vaso y el riñón de los animales diabéticos y de inhibir la expresión y la actividad de las subunidades de la NADPH oxidasa, el principal complejo enzimático prooxidante y generador de radicales libres en la diabetes.
Además, el estudio demuestra que la terapia basada en las proteínas SOCS promueve la expresión de enzimas antioxidantes (catalasa, superóxido dismutasa, etc.), por lo que proporcionaría una doble línea de acción para combatir el estrés oxidativo en la diabetes.
Este potente efecto antioxidante del tratamiento se correlacionó con una mejora de la función renal de los animales diabéticos y con una reducción en el tamaño de sus placas de ateroma.
En este sentido, señala Gómez-Guerrero, “nuestro equipo propone un abordaje que no presenta efectos adversos en cultivos celulares y animales diabéticos, y que podría servir para retardar la progresión del daño por estrés oxidativo en las complicaciones crónicas de la diabetes”.
El estudio, que ha sido publicado Laboratory Investigation, se realizó en ratones con diabetes, en los que se ensayaron dos abordajes experimentales: la terapia génica con un vector viral para expresar la molécula SOCS1 completa y el empleo de un péptido sintético que imita la funcionalidad de esta proteína.
Fuente: pacienterenal.general-valencia.san.gva.es