Xiao Wang tenía 17 años cuando todo esto se le ocurrió, porque así nace su problema, de una ocurrencia. En el año 2011, se le ocurrió que era buena idea vender su riñón para comprar no sólo un iPhone, sino también un iPad.
El asiático logró su cometido sin pensar en las consecuencias. A él le interesaba recibir los 600 euros, cerca de 58 mil pesos, para comprar sus gadgets. Gracias a la ayuda de intermediarios, el joven logró vender su riñón y sin la autorización de sus padres, se sometió a una cirugía que hoy lo tiene con asistencia médica las 24 horas del día. Este día se recuerda esta historia que se hizo viral en 2019, para generar conciencia en los jóvenes sobre el peligro ante las adicciones tanto a los gadgets, como a hacerse popular a través de las redes sociales, a costa del bienestar propio.
Wang confesó todo a sus papás después de la cirugía y cuando pasó la intervención quirúrgica, su familia logró denunciar a las personas involucradas en la venta del riñón de quien entonces tenía 17 años. Hoy, con 26, sufre las consecuencias de las lesiones provocadas por la cirugía.
La condición física de Wang comenzó a cambiar, a deteriorarse y tras varios estudios, se determinó que padece insuficiencia renal, por lo que tendría que ser dializado de por vida. Actualmente permanece en cama y conectado a una máquina que le ayuda a la diálisis, además de necesitar asistencia médica las 24 horas.
Encarcelados
De acuerdo a información recogida por Multimedios, los intermediarios fueron sentenciados a penas de entre tres y cinco años en prisión y también el médico que participó en la cirugía, aunque de él se desconoce la sentencia.
La familia de Xiao Wang, recibió por parte de las autoridades una indemnización de aproximadamente 374 mil 500 pesos, mismos que han ayudado a pagar los servicios médicos para que el ahora joven de 27 años tenga una mejor calidad de vida.
Tras la operación en la que le extirparon el riñón, este joven requerirá asistencia médica de por vida.
Fuente: news.culturacolectiva.com